Le encanta que otros hombres me vean.
Cuando vamos juntos por la calle, le gusta ir detrás de mí, sólo para ver cómo otros hombres -que ignoran que va conmigo- me voltean a mirar, me comen con la mirada o me dicen piropos que luego rayan en ricas y sucias obscenidades.
Después de un rato de ir detrás de mi, se empareja y excitado me dice que estoy bien buena. Que tengo unas nalgas riquísimas.
Más tarde terminamos en nuestro hotel favorito, más calientes que nunca. (CONTINUARÁ...)
jueves, enero 31, 2008
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